sábado, 20 de octubre de 2012

Ricardo Andrade (10 años después...)


Lo recuerdo bien… yo ese día (como cosa rara) me acosté temprano, era Domingo y generalmente los fines de semana eran para mi (en aquel entonces) muy agitados en la Iglesia y en el campo (de fútbol), por lo que estaba cansado y decidí acostarme temprano para recuperar fuerzas y empezar bien la semana laboral; esa noche ya cuando estaba más dormido que despierto, los cuatro fuertes golpes en la puerta de mi cuarto y los gritos de mi hermano me sorprendieron: “Vos! murió el peludo aquel!”, mientras asimilaba lo que había escuchado me levante de inmediato, corrí hacia la sala y le di volumen a la tele, estaba el noticiero dominical en donde confirmaban el deceso de Ricardo Andrade, (Músico importante del movimiento rock nacional); estando ahí parado frente al televisor, pensé muchas cosas mientras un fuerte pesar se apoderaba de mi, es decir, me costaba aceptar que me sentía triste por la muerte del músico, mientras asimilaba la increíble conexión que puede crear un músico a través de sus canciones; me explico: desde hace varios tiempo atrás seguía a la banda, los había visto un par de veces tocar en vivo y muy frecuentemente sonaban sus rolas en mis audífonos y nunca faltaban un par de rolas de ellos cuando tocábamos la guitarra sentados en el poste de la esquina de mi casa con los cuates, entonces… sabía quién era, pero nunca platicamos, nunca nos escribimos, o sea, no éramos cuates, y a pesar de eso… me dolió mucho su muerte; esa noche del domingo 20 de octubre del 2002 cambio la historia del rock nacional y de muchos seguidores del movimiento.

La muerte, aunque sería más adecuado decir “el asesinato” de Ricardo y Gabriel se dio de forma muy circunstancial, él (Ricardo Andrade) junto con Gabriel Rivera (Tecladista) realizaron un viaje de negocios, para organizar y promover tokes en el interior, los antes citados junto a Jorge Espaderos (Bajo) y Sergio Fernández “Taz” (batería) eran los integrantes de “Los Últimos Adictos”, una de las bandas más importantes del movimiento Rock nacional que sonaban fuerte en ese momento, a ese viaje se sumo Eva (la novia de Gabriel), quien camino de regreso a la capital sugirió que pasaran a visitar a un tío de ella que vivía en Sanarate, a lo que ellos no le vieron ningún inconveniente y accedieron sin problemas, ya para despedirse en la casa del tío, Andrade, Gabriel y Marco Vinicio (nombre del tío), salieron a platicar un rato al frente de su casa, momento en el que desconocidos pasaron disparándoles desde un taxi rotativo, (supuestamente  por una lucha de territorios) hiriendo y matando en el instante a Marco Vinicio (tío de Eva) y Gabriel Rivera, mientras que a Andrade lo dejaron gravemente herido, fue trasladado a un centro médico y soporto casi una semana en estado delicado, el ataque fue el 14 de octubre de aquel año, pero como lo decía en el párrafo anterior, fue hasta el 20 de ese mismo mes que Andrade dio su último respiro…

La noticia no es cosa nueva en una sociedad como la nuestra, es decir, diariamente mueren muchas personas de forma violenta, sin embargo, esta noticia en especial conmovió a toda la comunidad rockera en particular, no solo de Guatemala, si no también de países vecinos, fue verdaderamente conmovedor ver como durante todo el camino hacia el cementerio, cientos de seguidores del movimiento rock acompañaron el féretro mientras entonaban efusivamente las canciones del músico, algo conmovedor y hasta el momento nunca visto, recuerdo también que mientras observaba por televisión que metían la caja a la bóveda no pude ocultarlo mas y derrame un par de lágrimas, y déjenme decirles que no fui el único, al día de hoy veo a cientos de personas en los conciertos, para tributos o cuando alguien toca una rola de él, la gente la corea con lágrimas en los ojos, el sentimiento que causo y que hasta la fecha sigue latente de la muerte de Andrade es tan raro como mágico.

Siempre lo he dicho, la música de Andrade es la mas romántica de guate, no hay músico que escriba con el mismo sentimiento y pasión con la que lo hacía él, y lo más increíble de todo es que las rolas no sonaban “cursis”, también era uno de los músicos que mantenía el “mosh” durante TODO el tiempo que duraban sus conciertos, todas las rolas eran dignas de ser escuchadas y por que no… dedicadas.



Libro: "Si aquí se pudiera vivir..."
Autor: Sergio Fernandez "Taz"

El día de tu muerte fue sin duda “Un día Gris”, y con el pasar de los años aún se siente ese “Vacio” que dejaste, sin embargo, tu música sigue viva, aunque habrá que confesar que nos dolió mucho tu partida, ese viaje que hiciste a ese lugar que queda mas lejos que aquel país de “El Norte”, y ahora me cuestiono “por que te extraño tanto”?, puede que sean tus conciertos, tus letras y toda esa buena vibra que emitías con tus canciones, no sé como sería el movimiento “Si estuvieras aquí”, lo que sé es que “Eres tú” ese pretexto que muchas veces nos motivo a cantar, a saltar, a dedicar las letras de tus cancines, para sentir y vivir el rock nacional, por que gracias a vos nos atrevimos a “Romper el silencio”, ya sea para dedicarle una canción a esa persona especial o para sacarle la madre a Esos chuchos serotes!, tu música sigue viva, así como tu recuerdo en nuestro corazón, hoy… quizás estarás entablando “Una charla con Dios”, quizás sentados en un “Arco Iris”, o quizás estarás tocando guitarra bajo la sombra de un gran “Árbol”, sea como sea, ahora ya no estás con nosotros, dejaste de ser músico para convertirte en “Elemento”, mientras nosotros seguimos parados “En medio de esta fé”, imaginando como sería nuestra realidad Si aquí se pudiera vivir…


Hoy se cumplen los 10 años de su última nota, de su última letra, de su última rola, de su último suspiro, esa bala no te mató… sino que te inmortalizó!.

4 comentarios:

Elcol8 Erick !!! dijo...

Excelente relato brother !! Llegue a imaginar esta historia y regresar a ese recuerdo, yo aun estaba demasiado chavito pero todavia tengo ese recuerdo de haber visto la television con el feretro de Ricardo y centenares de personas alrededor y atras del feretro y otro centenar esperandolo a su paso... increible como pasa el tiempo pero se siente como que todo hubiese sido ayer... se siente aun su presencia. Un Angel vive en nuestros corazones...

Anónimo dijo...

Buena nota, gracias por sacarme unas lágrimas leyendo esto.........te extrañamos Ricardo.....hasta siempre!!!!

Unknown dijo...

¿Alguna idea sobre dónde podría adquirir el libro?

Unknown dijo...

Me hizo llorar.... Como olvidar a Ricardo Andrade.... Siempre vive aquí ♥️