Recuerdo bien esa mañana… un golpe de pronto hace q abra los ojos, inmediatamente escucho el llanto de una mujer, “mi mamá” pensé, acto seguido me levanto de golpe abro la puerta de mi cuarto y veo a mi hermano abrazando a mi madre justo al centro de la sala… “q paso?” pregunto mas asustado que curioso, mi hermano con sus ojos llenos de lágrimas me mira, y con la cabeza me dice “no”, mi madre, en medio de su triste llanto me cuenta: “acaba de morir tu papá!”; (la sensación que sentí en ese momento esta muy cerca de ser inexplicable, y muy dolorosa como para tratar de explicarla), mientras deslizaba la mano desde mi frente hacia abajo, pongo mi rostro en dirección al cielo y con los ojos cerrados suspiro profundamente, tratando de asimilar este dolor de su partida.
Hoy en la noche ya no habrá cena familiar, ni hubo por la mañana ese fuerte abrazo de cumpleaños al despertar, de hecho… no hay nada por que festejar, pero las flores que hoy adornan su tumba son un gesto simbólico de este día, es por ello que hoy no festejo, pero si recuerdo cariñosamente su cumpleaños viejito por eso le envío un fuerte abrazo sincero, una pequeña oración recitada al cielo y estas lágrimas de su hijo… quizás es mas cuentero, pero que lo extraña mucho. Nos vemos pronto “Husein” ;)
2 comentarios:
Mi Fernando... se perfectamente lo que sentis... mi viejito (que para mi no lo era lo suficiente) ya partió también. Se lo inexplicable de esa sensación, lo doloroso del momento y el nudo en la garganta que días aparece más fuerte que en otros.
No nos queda más que recordarlos como lo inigualables y extraordinarios que fueron. Fortaleza mi camarada, que Dios no nos da ninguna carga con la que no podamos cargar.
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